Ocupan las primeras planas en chismes, pero nunca en la tabla general.
El Atlético de San Luis Femenil una vez más es polémica, ahora no solamente por los malos resultados deportivos, sino también por los chismes que se corren dentro del equipo y que obligaron a que par de jugadoras del equipo lo abandonaran, no que fueran despedidas, sino que salieran en sus redes a comentar que muchas gracias a la ciudad pero no comparten los valores de la institución.
Mis valores como futbolista y como persona no coinciden con los del staff técnico ni con el proyecto del Atlético San luís Femenil, haciéndose presente en el trato recibido los últimos meses, por ello me veo obligada a no continuar perteneciendo a la disciplina del club. pic.twitter.com/24qbn1s0Re
— Bea Parra 💚⚪️🖤 (@beaparrasalas) May 19, 2023
Increíble que un técnico que no pudo cumplir los objetivos trazados en el ámbito deportivo, que siempre dijo que solo se quedó a un punto, a un juego, a un gol, a una acción de marcar una diferencia en la institución, que se muestre tan soberbio cuando llega a ganar y que no puede mantener la disciplina ni el respeto en el vestidor, no hayan anunciado su renuncia.

El técnico Fernando Samayoa nunca pudo mantener la disciplina en un grupo de futbolistas que, apenas ganaban un partido, solo uno, y festejaban como si hubieran ganado el campeonato con música a todo lo que da.
¿Se imaginan a Chivas Femenil o a Tigres Femenil festejar que le ganaron al León en la jornada 2? ¿O que le ganaron a Mazatlán en la jornada 6? Pues eso es lo que hacen de manera constante bajo la dirección de Fernando Samayoa, y se entiende, porque es a lo único que aspiran, ganarle a equipos sotaneros.
Y seguimos preguntando, ¿sirve de algo que esté Adriana Águila con el equipo? Ya se le ha dejado trabajar y no ayuda a resolver problemas en el vestidor, no hay un equipo que pueda entrar a Liguilla, entonces ¿Cuál es la ventaja de que esté cobrando en el equipo?
Al menos una de las mejores jugadoras del equipo, Bea Parra ya se va, increíble que digamos que una jugadora de 35 años sea la mejor jugadora del equipo, se lamenta su salida, pero ¿podrá alguien suplirla? Desafortunadamente no, era lo mejor del equipo y aún así estaba lejos de ser una de las mejores de la liga.





